Dentro del panorama escultórico de la posquerra, es digna de consideracion la figura de José Manuel Rodriguez Fernandez Andes, que tal era su nombre completo,el sevillano continuador de una modalidad escultorica muy arraigada en el ambiente artístico hispalense, como en la imagineria procesional,si bien, como veremos, no se circunscribío en su obra a esta modalidad solamente.
Habia nacido Fernandez Andes en Sevilla, en el barrio de San Vicente, en 1910 y, muy joven, ingresó en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artisticos de su ciudad, aprendiendo con maestros como el ya legendario Illanes y sobre todo con Castillo Lastrucci, en cuyo taller colabóró e incluso sirvió de modelo.

Pronto marchó a Madrid, antes de 1936, pues de esta fecha ya tiene obras en algunas iglesias madrileñas. En la capital, trabaa con el ran Coullant Valera y con este termina su formacion artistica.
Sevillano trasplantado a Madrid, se crea allí su nombre que le atrae contratos de distintos lugares de España,sobre todo del norte y de Levante, pero nunca se aleja mucho tiempo de Sevilla. A ella volvia cada primavera, "con el olor del azahar y las torrijas" , como me contaba su buen amigo, el tambien escultor y catedratico de Bellas Artes, Juan Abascal. Y aqui abria su taller en la calle Arrayan, o lo instalaba provisionalmente en la pension en la que se alojara. Un año, volvió antes. Estaba haciendo la talla de un cirineo para la Hermandad de Pasión, era el año 1950 y el 20 de Febrero,con la obra inconclusa,murió.
A pesar de su corta vida, su producción es muy amplia. La primera fecha documentada de una obra suya, nos lleva a 1931, en que contrata con la Hermandad del Baratillo la Virgen de la Caridad. Todavia en esta imagen se aprecia una cierta inseguridad que la hace un tanto ecléctica. Para esta misma Hermandad quince años mas tarde, en 1945, hace la Virgen de la Piedad, sin duda una de las obras mas bellas del autor y una de las más hermosas, con haber tantas, de las que hacen estación en la Seman Santa de Sevilla.
La delicadeza y perfecta ejecución que muestra en la Piedad del Baratillo, entra en la linea de nuestros mejore barrocos tardios, muy cercana al estilo de Duque Cornejo, e incluso de Luisa la Roldana.
A esta Piedad le siguen una serie de Virgenes que se inspiran en ella, asi tenemos por ejemplo la Dolorosa que mereció la medalla de plata de los Cruzados de la Fe en 1942 y que desde 1953 sale procesionalmente en la semana santa de Hellín. A esta misma linea corresponde la Dolorosa de la Parroquia de San Bartolome, de Rociana (Huelva) y la Virgen del Rosario, que junto con un explendido San Jose, hace en 1936, para el hospital de San Celedonio, del pueblo madrileño de Chamartin.
Durante el tiempo que va desde 1931 a 1945, su actividad es enorme, como la de otros tantos escultores, a raiz de la quema de las iglesias en 1931 y las posteriores destrucciones de la guerra civil.
El interes por reponer las imagenes perdidas y la marcha ascendente de Hermandades,Cofradias y  Asociaciones Religiosas, impulsó la factura de la imagineria y de la escultura de tema religioso. Unas de candelero otras de talla completa,otras monumentales,de pedra. En estas tres modalidades se distinguió Fernandez  Andes.
En Sevilla, en 1936, ademas de las obras citadas anteriormente, hace la Virgen de Gracia y Amparo,que actualmente sale con la Hermandad de los Javieres y en la misma fecha recibe el encargo de hacer, para la hermandad de los Gitanos, la imagen de Ntra. Sra. de las Angustias, solemne imagen de candelero, figura de "divina matrona" , de tez morena. Un año más tarde para la misma hermandad, hace a Ntro. Padre Jesus de la Salud, un nazareno patetico,ensangrentado,que junto con las Angustias hace estacion de penitencia en la Madruga del viernes Santo.
En definitiva, la serie de obras que hace para la hermandad de los Gitanos constituyen en su conjunto el contrato mas completo de cuantos recibió el artista.
En 1938, hizo para
 la hermandad de San Roque la imagen de Ntra. Sra. de Gracia y Esperanza, en la que ya se atisba la delicadeza y finura que despues plasmaria definitivamente en la piedad del baratillo.
Entre sus obras procesionales cuentan ademas el Gran Poder de Madrid,el Nazareno de San Idelfonso de Jaen y el Jesus Nazareno y la Virgen Dolorosa de Alcala la Real.
Estas dos ultimas obras se le encargan a Pepe Andes (como lo llamaban sus amigos)en 1937, al haber sido destruidas en 1936 las dos magnificas obras,de identica iconografia, atribuidas al granadinoJose de Mora, el maestro barroco del s. XVII.
Para realizar este trabajo se le proporciona al joven escultor varias fotografias de las imagenes destruidas, para que sobre ellas realizaran su obra, a fin de que el parecido entre las nuevas y las antiguas fuese lo mas exacto posible.
Tal vez, debido a esta imposicion, las dos imagenes que hoy podemos contemplar en la Iglesia de Consolacion, no refleen en su factura las calidades que Fernandez Andes supo dar a otras.
Hemos de tener en cuenta que la sensibilidad del escultor era muy sevillana.Se habia hecho a Martinez Montañez, a Juan de Mesa, a Pedro Roldan, a Duque Cornejo...Dificilmente podria haber asimilado a pesar de su oficio, la estilistica granadina. Imitó las formas y lo hizo bien, como un magnifico profesional que era, pero el espiritu es otra cosa, algo que no se puede imponer. Por eso tal vez, las dos obras que hizo para Alcala la Real participan, de una parte, de las caracteristicas de la escuela granadina y de otra, la tradicion imaginera sevillana. Mas cercanas estan de la formativa de Alonso Cano tambien se formo en la escuela sevillana, aunque despues realizara la mayor parte de su obra en la capital granadina.
Pero como deciamos al principio, la obra de Fernandez Andes, no se limita a la imagineria de Semana Santa, por que de otro tipo de figuras, tiene desde el monumento de la Inmaculada, realizadoen caliza en los años cuarenta, en el pueblo sevillano de Valencina de la Concepcion, hasta la patrona de Cadiz, la Virgen del Rosario, que hace en 1945, y que es coronada canonicamente en 1947.
Seria pesado hasta el extremo, enumerar cada una de las obras del autor que nos ocupa, pero como colofon e hipotesis final, dentro de las posiblidades de su campo, quiero apuntar un hecho, inconstatable por desgracia, pero cuando menos, curioso e interesante.
Entre los papeles de Fernandez Andes, que con toda la amistad y el cariño guarda Juan Abascal, al que antes he citado, me encontré con una serie de fotografias de la Virgen de las Mercedes, de la desaparecida imagen del S.XVI. Muchos de estos testimonios graficos tienen huellas de haber sido utilizados en taller. Sabemos que la actual imagen de la Virgen de las Mercedes, se hizo en Granada, pero tambien es evidente que nuestra Patrona suscitó interes y quien sabe si tal vez no le sirvió de modelo para alguna de sus imagenes marianas.
Hay circunstancias en una vida, que son puros enigmas. Pero si la vida es de un joven artista, un tanto bohemio y algo desordenado, seguir el hilo de su labor es practicamente imposible. Por sus obras se les conoce y francamente, por sus obras, es necesario decir que en su genero es uno de los mejores.
Pepe Andes, con su estudio de la calle Arrayan,sus azahares,sus torrijas,sus esporadicas instalaciones en la pension de la calle Lagar o de la calle Monsalves, sus sesiones de cine, al que era muy aficionado, con sus larguisimas tertulias...con toda esa vida que se le fue corriendo por delante en un dia de febrero de 1950, merece sin duda un estudio más profundo que esta escasa miscelanea que le dedico,como lo merece cualquier artista de talla, y la suya fue mucha.


                                                                                                         M.ª JOSE DEL CASTILLO UTRILLA  1988
                                                                                                                                                       Universidad de Sevilla.